“Esperamos poder nadar entre tiburones en La Polinesia”

Marc Casanova, Iñaki Solano y Pol Maruny, dando la vuelta al mundo en velero.

26 años. De Barcelona. Íntimos amigos. La vela es su pasión. Marc y Pol son licenciados en náutica y transporte marítimo. Iñaki navega desde que era un crío. El barco es un Bavaria Yatch 37 Cruiser del 2006. Tiene una eslora de 11,20 metros y una manga de 3,80. Zarparon el 5 de noviembre de 2012 desde Premià de Mar. La entrevista se grabó en Navidad en la isla de Saint Marteen (Caribe). Podéis ver en su web dónde están ahora mismo. En 2 años, tras haber recorrido unas 26.000 millas (41.843 km), piensan en volver a casa. Frase: «Dentro de 20 años no te arrepentirás de lo que has hecho, sino de lo que no te atreviste a hacer» – Mark Twain.

Entrevista.Sikkim.Foto tripulantes

Grabación y texto introductorio por Alejandro Fuentes-Lojo, quien fue a visitarlos y estuvo a bordo del Sikkim estas pasadas Navidades.

Sikkim Round The World

¿Cuántas veces inmersos en el bucle del frenético ritmo laboral hemos soñado con la imagen de un velero yaciendo en medio de las calmadas aguas cristalinas de una cala paradisíaca? La sociedad nos empuja río abajo bajo la promesa de que invertir tu tiempo en trabajar es lo mejor que puedes hacer hoy para ser feliz el día de mañana. Pero, ¿y qué pasa con hoy, acaso no tenemos derecho, o mejor dicho, el deber de disfrutar de la vida desde ya mismo? Los tripulantes del Sikkim después de haber navegado un tiempo empujados por la corriente de la sociedad, han decidido cambiar su rumbo dirección La Felicidad. El lema de su experiencia vital –“La vuelta al mundo en velero antes de los 30”- sintetiza muy bien su filosofía de vida: no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.

¿Le hago las preguntas al capitán o vais a responder los tres en nombre de todos?

En este barco no hay una jerarquía donde el capitán manda. Iñaki es el capitán –sus padres son los propietarios del velero- pero todos hacemos de todo y nos vamos complementando, así que respondemos todos.

¿Por qué la vuelta al mundo antes de los treinta?

Teníamos que marcarnos una fecha para cumplir nuestro sueño y ahora era el mejor momento. A medida que pasan los años las responsabilidades se agudizan y ahora no hay nada que nos ate. Hemos podido aparcar el trabajo y no tenemos pareja ni hipoteca.

Dicen que “en tiempos de crisis es mejor no hacer mudanzas”.

Es verdad que en el contexto que estamos el futuro es incierto y siempre angustia un poco la vuelta. Pero la crisis mundial no es nuestra crisis personal. No pensamos en el más allá, sino en el presente, en aprovechar al máximo este viaje.

Sois valientes.

Teníamos muchas ganas de hacerlo y lo hemos hecho. Ahora somos consecuentes con nuestra decisión. Con el paso de los años sabremos si fue un acierto o una equivocación, lo importante es poder llegar a valorarlo.

Seguro que os marca de por vida.

El viaje nos está demostrando que la vida es mucho más que los cánones que marca nuestra sociedad. Nos han educado para estudiar, luego trabajar e ir progresando para ganar cada vez más dinero. Pero hay muchas otras formas de enriquecerse. No deberíamos dar tanta importancia a lo profesional y crecer más como personas.

¿En qué os está haciendo cambiar este viaje?

Estamos aprendiendo a relativizar. Un problema es que se te hunda el barco, el resto se puede solucionar. La cuestión es que a veces en tierra nos preocupamos por chorradas y no tiene sentido que nos enfademos tanto.

¿Cómo lleváis la convivencia entre vosotros?

Bien, muy bien. Nos marcamos el saber convivir como algo primordial. Es importante ya que si en medio del Atlántico tienes problemas de convivencia puedes acabar amargándote el viaje…

Ya me imagino, ya.

Por eso ante un conflicto es mejor contar hasta diez y dejar que se te pase. Somos íntimos amigos y sabemos lo que gusta y disgusta a cada uno pero ello no quita que hayamos de ser más tolerantes que nunca entre nosotros.

Y más cohabitando en tan sólo 11 metros…

Ahí el reto. Si navegar fuera cómodo todo el mundo viviría en un barco porque es demasiado bonito llegar por primera vez a un puerto, una isla o una playa virgen.

¿Qué queréis darnos envidia?

Jaja no. De hecho, hay días que no te meterías en un barco por nada del mundo. Pero luego hay otros momentos que no tienen precio; bañarnos en medio del Atlántico fue una experiencia inolvidable.

¿No teníais miedo a los tiburones?

¡Hay que ver el daño que ha hecho a la sociedad la película Tiburón! Son animales que no atacan por naturaleza pero nos lo han vendido así. Existe el riesgo, pero es muy pequeño. La verdad es que tenemos muchas ganas de nadar entre tiburones, a ver si tenemos oportunidad en La Polinesia.

Me gustaría veros…

Bueno, a ver, el primer día que nos encontremos un tiburón nos iremos nadando cagando leches al barco, pero conocemos a gente que ha nadado y buceado con ellos y después de hacerlo varias veces la situación se normaliza, tú estás nadando igual que él, no tiene porqué venir y atacarte.

¿Qué peligros reales puede encontrarse uno en el mar?

Los piratas… si se te acercan no tienes nada que hacer. Están por Somalia, en la entrada del Mar Rojo, aún nos queda mucho tiempo para pensar si buscamos una ruta alternativa o subimos el velero a un carguero.

También nos preocupan los contenedores que a veces caen de los buques cuando hay mala mar. Al llevar aire dentro quedan flotando y cuando navegas de noche no se distinguen. Si colisionas con ellos está claro que el hierro es más fuerte que la fibra y el barco puede romperse.

¿Y las tormentas no os quitan el sueño?

Hoy en día los aparatos tecnológicos son muy precisos y vamos revisando el parte meteorológico constantemente. Un profesor de vela decía que “el mar se lleva a los más valientes” y nosotros, en este aspecto, somos muy tranquilos. Si un día no lo vemos claro no iniciamos la travesía, estamos haciendo este viaje para disfrutar.

Ya veo que no tenéis ni prisa ni grandes preocupaciones…

Hemos cambiado el chip.

¿Cómo describiríais un típico día vuestro?

Cuando estamos en alta mar básicamente tratamos de ocupar las horas del día con cualquier cosa. Dedicamos mucho tiempo a las comidas, a leer, vemos pelis, nos bañamos, pescamos… De todas formas, aunque parezca mentira, en un barco siempre hay cosas que hacer. A medida que navegas el barco se va desgastando y hay que ir reparando cosillas continuamente.

¿Y cuando llegáis a tierra?

Lo primero que hacemos es actualizar el blog y Facebook para dar señales de vida. Y luego nos encanta adentrarnos y conocer el país en que estemos y sus gentes.

¿Hay algo que echéis de menos?

El contacto con la familia, amigos, nuestra ciudad… se acostumbra a querer lo que no se tiene. Hay días que te despiertas y querrías ver el Barça, ir a esquiar o conducir muchos kilómetros. Pero no son más que antojos. Cuando tienes ganas, te adaptas a lo que sea. Hay que valorar lo que se tiene.

¿Queréis mandar algún mensaje a los vuestros?

Sólo decirles que nos acordamos mucho de todos porque tenemos mucho tiempo para pensar y que el barco tiene las puertas abiertas a quien quiera animarse unos días.

¡Buena travesía Sikkim!

Entrevista.Sikkim.Foto ruta

Ruta del viaje. Fuente: www.sikkimroundtheworld.com
P.D: Si quieres tener un recuerdo de esta entrevista en forma de camiseta con la frase “Dentro de 20 años no te arrepentirás de lo que has hecho, sino de lo que no te atreviste a hacer”, click aquí.
Anuncio publicitario

3 comentarios en ““Esperamos poder nadar entre tiburones en La Polinesia”

  1. Pingback: sikkimroundtheworld | Desde Los Roques, Venezuela.

  2. Qué razón tenia Mark Twain……siempre te arrepentirás de los sueños que no has hecho.
    Sois unos campeones ……vuestro sueño es el nuestro y ya lo creo que os iremos a visitar.
    Suerte para el resto de vuestro SUEÑO.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s