Alejandro Lucena, un empresario con valores.
28 años. De Barcelona. Vive desde hace dos años y medio en Sierra Leona, en un poblado de la región de Kono llamado Dorma (a 350 km de Freetown, la capital). Soltero. Estudió Empresariales. Es la cabeza visible del proyecto Palma de Palma donde le apoyan Veïns del Món, aquí, y Well Body, allí. No tiene sueldo, vive de los ahorros de sus cuatro años como corredor de seguros. Su mayor afición es jugar a fútbol. Ha venido a España unos días para la boda de uno de sus hermanos. Frase: “La diferencia entre los emprendedores que triunfan y los que no, es la perseverancia” – Steve Jobs
Diamantes de esperanza
¿Habéis visto la película Diamantes de sangre de Leonardo Di Caprio? ¿Recordáis la zona dónde está escondida la piedra preciosa? Allí vive desde principios de 2011 Alejandro Lucena, quien lo dejó todo para ir a liderar in situ un proyecto social con el objetivo de mejorar las pobres condiciones de vida de muchas familias sierraleonesas. Después de dos años y medio, gracias a mucho sudor y pundonor, puede sentirse orgulloso de que Palma de Palma, la empresa que ha creado, haya alcanzado su fase adulta y se haya confirmado el éxito de la iniciativa. A nivel social ha conseguido, a través de la agricultura, ofrecer una alternativa de trabajo a la explotación que existe en las minas de diamantes. Y en el plano empresarial, han empezado a vender este 2013 y sus productos están teniendo muy buena acogida en el mercado local, por lo que pronto obtendrán beneficios. Sin duda, se trata de un proyecto entrañable que tiene al frente a un diamante como persona.
¿En qué consiste el proyecto Palma de Palma?
Es una empresa social en Sierra Leona que se dedica al procesamiento de la fruta de las palmeras para obtener y comercializar aceite de palma (equiparable aquí al aceite de oliva) y jabón. Lo que hacemos es comprar el excedente de fruta que tienen muchos agricultores.
¿Y en qué beneficia a los sierraleoneses?
Además del empleo generado en la fábrica –actualmente trabajan quince personas-, el objetivo es ayudar a mejorar las condiciones de vida de estas familias de agricultores que no tendrían ingresos de ningún tipo. Podríamos tener una plantación propia pero así conseguimos generar una economía sostenible que promueva el desarrollo a través de la agricultura.
¿Y en qué os diferenciáis de una ONG?
En que el proyecto ha de generar beneficios para poder ser sostenible por sí mismo. Yo no puedo volver a España cada año y pedir más dinero. Han de ser los sierraleoneses quienes se impliquen y desarrollen el proyecto. Nosotros sólo les damos un empujoncito, no he ido allí para quedarme.
¿Con qué presupuesto partiste?
El primer año conseguimos donaciones por valor de 20.000 euros para comprar la maquinaria pero finalmente el 50% se necesitó para construir la fábrica ya que no se pudieron reaprovechar las instalaciones previstas. Nos faltaban 14.000 euros que, gracias a muchas personas implicadas, hemos podido conseguir este segundo año.
¿Estás satisfecho?
No hay que hacer comparaciones pero… hemos creado una empresa con lo que aquí cuesta un coche.
Intuyo que no habrá sido fácil con recursos tan limitados.
Me he dejado la piel negociándolo todo. Y también he tenido que armarme de paciencia. Cuando llegué allí vi que no era tan sencillo llevar a cabo la idea que quería desarrollar. Todo eran impedimentos y mucha lentitud. Sé que esto no hubiera pasado si, por ejemplo, hubiéramos importado la maquinaria de Alemania y hubiera cogido un buen arquitecto pero la filosofía de esta empresa es promover la economía del país.
Has predicado con el ejemplo.
Así es como los trabajadores se han ido implicando y han ido sintiendo el proyecto como algo propio. Gracias a haber ido completando cada fase con éxito se han ido viendo capacitados para tirar adelante la empresa.
Y así es como también has conseguido que confíen en ti…
Ellos no me lo dirían nunca pero si contratase medios extranjeros estoy seguro que les afectaría. A veces son muy pesimistas…
¿Por?
Sierra Leona es uno de los países más ricos del mundo en recursos pero a la vez uno de los más pobres. ¿A qué se debe? Entre otras cosas, a que prácticamente toda la riqueza de las minas y los beneficios de la venta de diamantes no se quedan en el país.
Todo lo contrario que Palma de Palma.
Cuando consigamos beneficios –en principio a partir de ya-, como decía, primero los reinvertiremos en el proyecto para que sea sostenible y, segundo, también los destinaremos a los programas de salud que lleva a cabo Wellbody en la región. Y más adelante, la idea es poder replicar la empresa en otras zonas del país.
¿Qué lecciones has sacado a nivel empresarial?
La perseverancia. Y más si se trata de un proyecto de emprendimiento. Si te hubiera presentado el proyecto hace un año no hubieras creído en él…
Desgraciadamente lo habitual es tirar la toalla…
Suele ser el problema. Ha habido otros proyectos en la zona en que los voluntarios han empezado con muchas ganas pero luego se han cansado y lo han dejado a medias. Se frustran al ver que han de cumplir con unos plazos y objetivos y no pueden (quieren) alargar su estancia.
¿Cómo has aguantado?
He tenido la suerte de contar con el respaldo de mi familia y amigos. Siempre que he llamado a casa preocupado me han sabido consolar. Gracias a ellos soy el blanco que lleva más tiempo allí.
Entiendo que los sierraleoneses también deben cuidarte bien.
Sí. Allí soy uno más desde el primer momento en que llegué. La primera semana ya estaba jugando a futbol con el equipo del pueblo.
Tienen el sentido de comunidad más desarrollado.
Sin duda. Cada día cruzo el poblado caminando para ir al trabajo y todo el mundo me saluda. Por la mañana me dicen: “Buenos días Alejandro, ¿cómo has dormido?” y al volver por la tarde me preguntan si ha ido bien el trabajo. Ellos sólo han tenido que recordar un nombre y yo cientos, pero al final he conseguido memorizarlos todos.
Como una gran familia.
Sí. Mira… siempre que he estado enfermo –he cogido tres veces la malaria y una vez tuve piedras en el riñón- me han venido a ver y se han preocupado por mí.
¿Es muy diferente tu vida allí?
Hago lo mismo que haría aquí.
¿Seguro?
Cuando voy hacia allí cambio de chip. Me he acostumbrado a una vida mucho más tranquila, a no tener agua corriente ni electricidad y a desayunar cada día avena a pesar de que la odiase al principio.
Después de todo, ¿qué es lo que te mueve?
Es mi pasión, no sé cómo te lo puedo definir, el proyecto es como un hijo para mí, es ir paso a paso y ver cómo una idea madura y se va convirtiendo en realidad.

Me ha encantado la entrevista !!! Enhorabuena !!! La foto de Alejandro es brutal , que mirada tan franca y tan serena ….. Mi mejor sonrisa Juan
Enviado desde mi iPhone
Muchas gracias María José!!! Alejandro es un crack, sí!! Sonrisas! JF
«Predicar con el ejemplo» eso sin duda aunque es mucho más dificil, estoy convencido que dará sus frutos! Enhorabuena por el proyecto y a seguir luchando!
Proyectazo! eres un crack Alejandro…perseverancia es sin duda la clave del éxito. Mucha suerte.
Felicidades y suerte Alejandro, reflejas una pasión y un entusiasmo por lo que estás haciendo digno de admirar.
Gran ejemplo de entrega, esfuerzo, austeridad y como él dice, perseverancia. Felicidades Juan por la entrevista.
Que bueno q Sierra Leona cuente con Alejandro, para mejorar las condiciones de vida de muchos familias agricultores. les deseo mucho Excito y suerte a Palma con Palma felicidades Juan por la entrevista…..
Brutal tanto el proyecto como la entrevista! Me gusta mucho el punto de vista de Alejandro de que los sierraleoneses han de ser los que fomenten su propio desarrollo. Creo que eso es algo esencial cuando te planteas un proyecto en un país en desarrollo. Muy muy interesante! Felicidades a ambos
Suerte tenemos de personas como el «luce». Q envidia me da…….
Felicidades por la entrevista. Fuimos amigos en la infancia, nuestros padres eran vecinos. Gracias a esta entrevista entiendo mucho mejor lo que hace y me he puesto en contacto con él.
Gracias y suerte amigo!
Me alegro mucho Natalia! Gracias! Suerte amiga!
ES fantastico,,, Lo veo muy bien.. Yo tambien voy para alla a trabajar en la agricultura,…. Si alguien se quiere venir a trabajar y ayudar,,, mi telefono es 632547693, soy de Malaga y me llamo juan Antonio…
Yo me voy a poner en contacto con el….