Lara Concellón. Impulsora de Dentistas Pro Raval.
24 años. De Barcelona. Odontóloga. Le gusta dibujar, leer y correr detrás de los niños. Frase: «A veces sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le faltara esa gota.» Madre Teresa de Calcuta.
Dentista sonriente
De pequeña era la clásica niña que siempre se apuntaba con el colegio a ir a ayudar a comedores sociales. Y que soñaba con irse a África con Médicos Sin Fronteras. Ahora, con el sueño vigente, ha acabado siendo dentista y está encantada de ello. Convencida tanto espiritual como humanamente de que darse a los demás es lo que le hace feliz, Lara ha juntado su vocación altruista con la médica poniendo en marcha Dentistas Pro Raval, un ambicioso proyecto que pretende ayudar en el cuarto mundo, en el barrio del Raval de Barcelona. Concretamente en el centro abierto Casal dels Infants, donde un día acudió como voluntaria y dijo que no volvería al no verse capaz de volver a sufrir tal revolución infantil. Hoy es su prioridad, esos niños forman parte de su vida.
A los 20 años tuve una crisis existencial.
¿Qué le pasó?
No sabía qué narices estaba haciendo, toda mi vida estaba llena de banalidades. Quería dejar la carrera y pensaba que todo era una mierda.
¿Lo solucionó?
Mi madre me dijo que cuando estás agobiado y piensas mucho en ti, la solución pasa por dejar de pensar en ti y pensar en los demás. Ahora es el motor de mi vida.
¿Y qué decidió?
Volver a hacer voluntariado. ¿Sabe qué? Sigue leyendo









